Clarisimos los penaltis, clarisimo que el Betis está en la cabeza de la clasificación de la Liga. Seis puntos en dos partidos, jugando bien, y, como subraya Pellegrini, con once jugadores que faltan en la convocatoria. Estos pocos datos explican – aunque ya lo sepan todos – que grupo compacto, “que crece en la adversidad”, logró formar El Ingeniero. “Fuimos justos ganadores de un partido disputando y difícil”.
Frente al Mallorca que habíamos admirado en Bilbao hace pocos días, donde logró un merecido empate – equipo sólido, decidido, de excelentes individualidades – no era tan fácil. Sin embargo, el Betis ha demostrado que las cuestiones “extra” (palancas y todo lo demás) no influyen en la mentalidad y el juego expresado en el campo. Es la virtud de los fuertes, de los grandes equipos que van a alcanzar los objetivos que quieren, superando todo tipo de problemas.
En el minuto, 9 penalti claro (mano de Battaglia) y El Panda ha llevado adelante el Betis; luego, los hombres de Pellegrini controlan el juego, pero una acción magistral del Mallorca llevó a Muriqi a empatar con un golpe de cabeza. El pobre Battaglia, una vez más, no sabía cómo detener a un Fekir creativo como siempre. Otro penalti de Borja Iglesias ponía el marcador a favor del Betis. En otros tiempos habría sido un empate. Pero la suerte premia a los audaces, como dice un lema latino, y, añadimos nosotros, los que creen en sí mismos.
