Como muchos han comentado en su momento, la confirmación de Lopetegui al frente del Sevilla, lo que se diga hoy, no ha sido una “plena” confirmación. Demasiadas dudas entre los aficionados y alguien en la directiva. El comienzo impactante de la Liga (un solo punto contra Osasuna, Valladolid y Almería, no hablamos de equipos top) hizo surgir una desconfianza en la guía técnica que, después de solo tres partidos, no debería haber.
Es el tema del día. Y ahora comienza lo peor. En tan solo quince días, del 3 al 18 de septiembre, el Sevilla tendrá que afrontar en el orden Barcelona y Manchester City en casa, Espanyol, Copenhague y Villarreal a domicilio. Polémicas inútiles, hoy, las sobre Lopetegui: antes de este “tour del miedo” el entrenador permanecerá en su lugar, viceversa sería un suicidio. Bastaría con algún buen resultado o quizás, antes de esto, demostrar que el equipo tiene un carácter.
No es posible que en la primera circunstancia desafortunada el Sevilla casi se disuelva. También faltan jugadores, pero Lucas Boyé y José Campaña, que parecen ser los fichajes más probables en estas horas, no pueden cambiar el curso de los eventos. Un poco de suerte también. Ciertamente el ambiente está destruido y Monchi en Almería ha puesto la cara, prometiendo a los hinchas, que pediron la dimisión de Lopetegui, una nueva etapa.
La única noticia positiva del fin de semana fue la victoria del Sevilla Femenino (3-1) en el derbi contra el Betis en la final de la Copa de Andalucía. Un merecido triunfo de las chicas que han ganado con goles de Martín Prieto y Ana Franco: felicidades.