Si no se puede llegar a la Champions League por méritos deportivos, también se puede llegar por caminos cruzados. Es lo que han pensado en un club milanes aficionado, el Brera Fc, “el tercer equipo de Milán” como lo han definido orgullosamente los propietarios (incluido el ex campeon Goran Pandev) y sus pocos seguidores. De nerazzurri y rossoneri hay un abismo, pero afinando las estrategias “un día podríamos también encontrarnos”. En un campo de fútbol.
El Brera ha cotizado en el Nasdaq, con casi ocho millones de dólares, para comprar sociedades de países futbolísticamente menores como Gibraltar, San Marino y Far Oer o a los africanos Gambia y Mozambique. Un acuerdo ya lo tienen gracias a Pandev con Macedonia del Norte y su Akademija de Strumica que milita en la máxima serie. Liga poco competitiva, pero todavía dentro de las competiciones de la UEFA estamos.
Y así dentro de algún tiempo se podrá quizás ver un partido Brera Far Oer-Liverpool absolutamente horrible desde el punto de vista técnico pero que gracias al proyecto del club milanes (y al dinero “encontrado” en la Bolsa) podría llevar a las cajas del club 3 millones y medio (por la participación en la Europa League) o incluso 15,5 millones (Champions). El modelo Brera es aún más amplio. Solo tienes que tener imaginación y verás que el campo de juego también será menos importante.