¡Adiós Raffaella! El icono que unió, con la ligereza de la Fiesta, Italia y España

Raffaella Maria Roberta Pelloni , en arte Raffaella Carrà en homenaje al pintor futurista Carlo, artista polivalente, bailarina, cantante, actriz, conductora , se ha ido. Por sorpresa, como en sus espectáculos, pocos sabían de su enfermedad. No deja hijos, pero como decía siempre: “Tengo 150.000”, aquellos que se han hecho adoptar gracia al programa “Amor”. Debutó en el ’61 en Tiempo de danza al lado de Lelio Luttazzi, pocos años después se hizo popular en Italia con “Canzonissima”, donde causó gran revuelo por su ropa considerada en la época “escandalosa”: nada más que mostrar el ombligo.

Raffaella siguió provocando, divirtiéndose, con el “Tuca tuca” . Fue muy querida en España, símbolo de las costumbres post-dictadura: entre los programas más conocidos, el popular “Hola Raffaella” en TVE a principios de los años noventa, “En casa con Raffaella”en Tele 5. Tan querida que fue premiada en 1985 con la Medalla al Mérito Civil de España. Todo el país cantó a su tiempo “Hay que venir al sur ” o “Fiesta” o “Explota, explota”.

El prestigioso periódico inglés “The Guardian” dedicó una página a Raffaella, “un icono cultural que revolucionó el entretenimiento italiano y dio a las mujeres la posibilidad de tomar la iniciativa en el dormitorio”. Pedrería a voluntad, plumas, mantillas y vestidos cortos, además del imprescindible pelo a lo casco rubio, Carrà “enseñó a las mujeres que tener libre albedrío en el dormitorio no era escandaloso, que estaba bien enamorarse de un hombre gay y que no todas las relaciones son sanas”. 

Una revolución, seguida hoy en día por muchos que copian a Carrà o que se inspiran en ella, como en el musical “Explota Explota”, que el director Nacho Álvarez ha creado, precisamente, a partir de las letras de sus canciones. “Estoy sorprendida, no esperaba tal reconocimiento – comentó Carrà -, ¡realmente me impactó! Les deseo todo el éxito que se merecen, también porque la película se estrena en un momento particular en el que los problemas de la gente son otros, pero ellos no tienen la culpa”.

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