El logotipo del equipo de fútbol de Cañada Rosal (Adyo, que significa Asociación Deporte y Ocio) se había vuelto embarazoso, hasta el punto de hacer discutir a niveles altos y con amenazas de llevar la cuestión a los tribunales. La Adyo que afirma querer aclarecer sobre el episodio anunció que el logotipo del PSOE será retirado de las camisas y los trajes: bienvenidos a los patrocinadores, pero poner un equipo con el escudo de un partido no está bien.
En Rusia uno de los equipos de futbol de sala más fuertes se llama KPRF, es un club que lleva hoz y martillo, vinculado al partido y financiado por Gennadi Zyuganov, entre los fundadores del verdadero Partido Comunista de la Federación Rusa. Sólo para decir que la política siempre ha intentado poner sus manos en el deporte. No es éste el caso, pero se trata de una cuestión polémica, como en los viejos tiempos. Los árbitros siempre han sido, para quien perdía, de izquierda o de derecha. Incluso las formaciones de fútbol más conocidas están etiquetadas de una u otra parte y los aficionados siguen dócilmente las decisiones del sentido común.
“En ningún momento si pretende la politización de ninguno de nuestros jugadores ni de nuestro club” dice Adyo como informa El Diario de Sevilla “subrayando la necesidad de “colaboración de todas y cada una de las instituciones de nuestro pueblo para nuestra supervivencia, así como para poder seguir ofreciendo una alternativa en el deporte a niños y mayores”. Pero el Partido Popular no está de acuerdo y ha amenazado con acudir a los tribunales, en un lugar, Cañada Rosal, donde el PSOE dicta la ley con pleno control político.
