Resueltas las dudas en un día, los votantes andaluces eligieron la estabilidad. Nunca tan alto el Partido Popular. Un 43,1% de votos, una cantidad nunca alcanzada en la Historia, que vienen en parte también del PSOE y de Vox, que pierde mucho, casi siete puntos, pasando del 20% al 13,45% de ayer, respecto a las elecciones generales de hace tres años.
El presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, confirma que es un líder, habiendo convencido a los andaluces de seguir un camino político sin desvíos peligrosos. Con 58 escanos el PP gobernará solo (la mayoría absoluta es de 55). Ciudadanos ha desaparecido y el número uno andaluz, Juan Marín, ha anunciado su dimisión. Un millón y medio de votos, los populares, frente a 883.000 socialistas (30 escanos, un 24,26% que es el resultado más bajo de Andalucía).
58,38% de participación, un buen resultado para los tiempos que corren. La victoria neta del PP lanza la campaña de Alberto Núñez Feijóo, líder nacional, por la conquista de la Moncloa. Vox tendrá que hacer sus reflexiones sobre un voto que aparece más como una renta de posición que otra cosa. El mismo discurso para los partidos de izquierda. Por Andalucía de Immaculada Nieto, la unión de IU, Podemos y Más País, tiene cinco escanos, Adelante Andalucía, de Teresa Rodríguez solo dos. A la espera del proyecto “Sumar” de Yolanda Díaz los números son estos.
