Con tres partidos no fáciles (esta noche al Martínez Valero con el Elche, Sevilla en casa y Real Sociedad en San Sebastián en la última) y solo 3 puntos de ventaja, el Atlético de Madrid desde anoche no se siente tan seguro de su clasificación para la Champions. No va a ser fácil, pero el Betis ha vuelto, de manera suntuosa. José Bordalás recordará esta temporada durante mucho tiempo: siempre ha perdido frente a Manuel Pellegrini y 17 días después de la derrota en la final de Copa del Rey, su Valencia ha sido aplastado por un equipo que solo la mala suerte – nos referimos al partido con el Barcelona donde se merecía mucho más – se mantuvo alejado de los cuatro primeros lugares.
Si fuera el mérito el que eligiera, por el juego exprésado y la temporada que ha hecho, es el Betis el equipo que debería ir a la Champions. El calendario no es imposible, aunque sea difícil (¡maldita sea la derrota con el Elche!): el Granada en casa y el último en el Bernabeu, pero con un equipo que ya estará saciado y pensará solo en la final.
Ayer vimos a un equipo más fuerte que otro. Willian José, que merece confianza, Canales y Borja Iglesias han firmado un partido que ha puesto en evidencia la grandeza de este grupo de jugadores, porque no era fácil levantarse después de una derrota tan injusta como la de los hombres de Xavi. Mercado: Betis ahora compite con los grandes clubes por los mejores talentos. Puede que no tenga los recursos financieros de Barcelona y Real Madrid, pero también es una señal de que a los jugadores les gusta el destino.
Prueba de esto son la solicitud de información para Marc Roca y Fabian Ruiz (que no es un sueño, aunque el Barcelona estaría dispuesto a hacer locuras por él y en ese caso paciencia, el fuera de serie de la selección tiene una cotización “demasiado” importante) y, según fichajes.net, la futura afiliación del talento argentino Álex Luna, que todos los grandes clubes querían (“El nuevo Diez” ha sido cortejado por Manchester City, Barcelona, Atlético Madrid, Bayern y Milan entre otras). Es hora de mirar la realidad. El Betis está entre las grandes.
