Cervera, el entrenador del Cádiz, tiene una particular admiración por el Betis y por su “amor” de la pelota: “Es un equipo que mantiene la posesión, te ganar intenta con el balón. Es un equipo peligroso” cuyas ausencias en el once titular de mañana sólo servirán para confundir a Cervera un poco más las ideas. Porque sí, es verdad lo que dice, el Betis juega un fútbol de calidad gracias – nunca dejaremos de señalarlo – al arte y a la paciencia del señor Pellegrini.
El chileno ha iniciado un ciclo, hecho también de planes de negocios para las próximas temporadas, valorización de los jóvenes de la cantera, pero su figura hierática, respetada por todos, también ayuda a resolver pequeños problemas como los que se están resolviendo en estos días sobre los contratos de los jugadores. Es un manager al estilo de Ferguson, o al menos así lo vemos y esperemos que lo sea.
Tiene todo que ganar el conjunto verdiblanco que es cada vez más convencido de sus propios medios, logra formar ese rompecabezas ganador que hasta ahora le ha llevado a luchar por lugares europeos y mañana quién sabe. Contra el Cádiz, que hace tan solo unos días empató en Barcelona, no habran Camarasa (buenas noticias llegan sobre él para una pronta incorporación), Bartra, Fekir y Borja Iglesias, además del descalificado William Carvalho.
Lo que hasta hace poco daba miedo – no encontrar los sustitutos adecuados – es hoy una pequeña preocupación, gracias sobre todo a un grupo de canteranos que hace muy bien esperar, primero entre todos ese Raul que mañana podría ser titular y sorprender a todos. Pero cuidado con este Cádiz, que vuela con el contragolpe. Claro, pasada esta dura prueba, habrá Alavés y luego el derby con Sevilla. Soñar es lícito después de ganar 16 puntos en las últimas 7.
