Ella, él y el otro, la comedia esta vez se ha convertido en tragedia en Alcalá de Guadaíra. Treinta y nueve años ella y 47 el amante, que ella hacía pasar por primo, idearon un plan meticuloso para matar al marido de la mujer. A pesar de una herida casi letal en el pecho por un disparo de escopeta, el hombre no murió. La mujer y la amante fueron arrestados también porque, según fuentes locales, tenían en mente terminarlo con una segunda acción homicida.
La policía ha reconstruido la dinámica de los acontecimientos: el 13 de julio el marido de la mujer fue golpeado en frío mientras iba con su ciclomotor al campo. A pesar de las heridas más graves, sobrevivió. Y ahí es cuando la mente retorcida de los dos puso en marcha el plan B. La policía encontró en posesión de los dos un rifle, un cuchillo de gran tamaño, cambios de vestido para no ser atrapados en la fuga, e incluso pasamontañas y peluche.
Sólo la velocidad de intervención de la Policía local evitó que el hombre fuera “acabado” como en las películas de la mafia. Como decía el gran poeta Mario Benedetti, “en la vida hay que evitar tres figuras geométricas: los círculos viciosos, los triángulos amorosos y las mentes cuadradas”. La pareja diabólica obviamente no lo había leído.
