En Algeciras conviven desde siempre comunidades de etnias diferentes. En el extremo sur de Andalucía, Marruecos está a un paso. Una ciudad conmocionada de una tragedia que no dejará de provocar odios. Lo que los investigadores creen que es un “lobo solitario,” un joven de 25 años de origen marroquí, Yassine Kansar, anoche alrededor de las 8 pm comenzó a asaltar varias iglesias del centro de la ciudad con un machete. Terrorismo, pero individual.
Ha matado al sacretastán de Palma, Diego Valencia, y herido de manera grave a Antonio Rodríguez Lucena, párroco de San Isidro. Enseguida llegó el pésame de todo el mundo y de Moncloa con las palabras del primer ministro Pedro Sánchez. Fuertes las palabras del líder de Vox, el partido de la extrema derecha española, Santiago Abascal, quien subrayó que “unos les abren las puertas, otros los financian y el pueblo los sufre”. “No podemos tolerar que el islamismo avance en nuestro suelo”.
